Aveces es agotador escucharme hablar, o hasta tal vez el simple hecho de leerme. Soy colgada desde que tengo uso de memoria, por ende me cuelgo hablando, sea con quien sea. Quizá me olvido que la persona con la cual estoy hablando no le interesa en lo más mínimo lo que digo, pero aún así, no puedo callarme. Es porque me gusta hablar, oralmente o por escrito, que me hice este blog. Escribir en las notas de mi celular tiene su encanto, pero no se compara con escribir cuantas palabras quiera sin que me diga "Máximo de letras 1500", y escribirle a las personas también me gusta, pero llegar al punto en el que me cambien de tema ya no.
Me gusta tanto hablar que escribí una entrada sobre eso, genial, eh... Ja. A lo que quiero llegar es que es probable que mis publicaciones empiecen por un tema y terminen con cualquier otro, como dije anteriormente, soy muy colgada/distraída.
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