sábado, 14 de diciembre de 2013

Cannabis y yo.

Cannabis, Marihuana, Mota, Porro. Miles de nombres hacia una planta la cual es socialmente considerada una "malévola" droga. ¿Qué es para mi esta antigua planta? O mejor dicho, ¿Qué no es? Eso si puedo contestarlo rápido y sencillamente, UNA MALÉVOLA DROGA.
Muy antiguos son los textos que delatan la presencia del Cannabis, en todos o casi todos de ellos demuestran que era utilizado de manera medicinal. ¿Por qué hoy no es visto así? En esto se encuentra entrometida, como en muchas otras cosas que nos rodean diariamente, la corrupción. El dinero, la plata, el billete, aquel trozo de papel al cual tanto valor le damos, tanto que muchos llegan a elegirlo antes que la vida de otro ser humano, y si no es tanto el caso, el bienestar del otro. La historia de la prohibición del Cannabis la voy a contar, pero no hoy. Hoy voy a contar el porqué el Cannabis es tan importante para mi, qué fue lo que causó en mi vida y mente y porqué una simple planta se volvió parte mía en un corto lapso de tiempo.
Todo empezó el 8 de mayo de 2012, apenas cumplidos mis 13 años. Muchos al leer esto quedarán sorprendidos, algunos quizá para bien, pero sé que muchos otros para mal... bah, en caso de que lo lean. En fin, mi querido hermano el cual voy a llamar "Checho" es cultivador de Cannabis, le interesa mucho el tema también, yo sabía que cultivaba pero en ese entonces yo nisiquiera conocía la palabra Cannabis. Antes de ese 8 de mayo decidí ir con él, le pregunté si me convidaba y me dijo que no, le volví a insistir y me respondió: "Dame una buena razón por la cual quieras probar", le dije: "Todos aquellos que probaron aseguran que es algo único e inexplicable, intentar explicarlo es absurdo. Entonces, quiero explicarmelo a mi misma", dijo: "Mm... que pendeja. Tomá, una seca nomás, dale de pulmón". Esa vez no me "pegó", no hubo efecto. Al llegar el 8 de mayo, me preguntó si quería fumar con él, le dije que si y así fue. Esa sensación de bienestar y esa calma interior fue completamente ÚNICA. Alfín había podido entender lo inexplicable. Volvimos a fumar reiteradas veces, cuando al principio para mi solo era fumar, luego se volvió algo más "psicológico y mental". Gracias al Cannabis me di cuenta de muchas cosas, soy una chica muy caótica, los problemas y yo vamos de la mano. Fueron necesarios un par de viajes para empezar a pensar, empezar a reflexionar, a filosofar. Empecé a charlar con mi hermano, charlar de lo que sea, de la vida, de él, de mi, de todo. A él le llamó la atención mi cambio, se notaba hasta en mi vocabulario, pero solo era cuando estaba "colocada". Con el tiempo, cortas etapas de tiempo, me empezó a interesar la filosofía, mantenía siempre mi mente activa (esté o no colocada), tiraba frases que a mi parecer eran geniales, me encantaba. Luego de eso, pasé de lo filosófico a lo psicológico, aprendí a autoanalizarme, le encontré la importancia a aquellas cosas que yo tanto ignoraba, aprendí a aprender.
No son muchas las personas que están a favor del Cannabis, muchos dirán que me quema las neuronas, etc etc. ¿Pero saben qué? Prefiero neuronas quemadas a apagadas, ya que antes de quemarlas por lo menos las usé. Antes de esto mi mente simplemente estaba para rellenar mi cabeza, por fín ahora puedo darle un uso. Si no les gusta lo que escribo, retirense. Nadie los obliga a leer esto. Es MI blog y voy a hacer con el lo que quiera, cuando quiera y porque quiera, como dije anteriormente.

PD: Es un mito lo de "quemar neuronas", sé porqué lo digo. Saludosssss!

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